"Más vale tarde que nunca"
Don Joaquín Bastús, en su obra “Memorando anual y perpetuo” (Barcelona, 1855), dice acerca de este refrán que su origen es el siguiente:
“Siendo ya de mucha edad el filósofo Diógenes, se propuso aprender la música, y habiéndole dicho uno:
– Iam senex discos, ‘ya eres viejo para aprender’,
le contestó:
– Praestantius sero doctum esse, quam numquam, ‘vale más tarde que nunca’.